XV Domingo
del Tiempo Ordinario
Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo ¿Y quién es mi prójimo? ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos? Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.» Le dijo Jesús: «Anda, haz tú lo mismo» Para encontrar al Dios vivo, dijo el Papa Francisco, es necesario besar con ternura las llagas de Jesús en nuestros hermanos hambrientos, pobres, enfermos y encarcelados. Es en las llagas de la humanidad que nos rodea donde podemos encontrar a Jesús. Quedarnos sólo en la meditación, además de peligroso, es incoherente en la vida cristiana: orar y trabajar, meditar y ayudar, escuchar y hablar han de ser los parámetros de nuestra identidad y adhesión a Jesús.
Para tocar al Dios vivo, no hace falta hacer un cursillo de actualización sino socorrer al Dios vivo. Y, para ello, es necesario salir a la calle y tener el valor de ofrecer nuestra forma de pensar en cristiano, nuestra óptica sobre la vida, el amor, la familia y, por supuesto, la caridad. La caridad que es más que solidaridad. Prójimo es aquel que me exige salir de mí mismo para medir si, en verdad, la fe es operativa y práctica o se quedó en simple teoría
Prójimo es aquel que inconscientemente se deja atacar en su dignidad antes que llevar o posicionarse en contra de las ideologías dominantes ? Prójimo es aquel que ha sido arrastrado por las corrientes de lo inmediato, de lo pragmático y luego ha quedado sin respuestas tirado en el suelo
Prójimo es aquel que ha sido despojado de lo que era resorte y apoyo en su existencia por aquellos que cabalgan en el caballo del poder y del todo vale para que la sociedad se quede sin moral ni ética alguna ? Prójimos son, en definitiva, las personas que salen a nuestro paso en mil circunstancias y con mil nombres y apellidos. En este Año de la Fe, además de profesar las grandes verdades de nuestro catecismo nos viene a nuestro encuentro un interrogante: ¿hacemos algo por nuestro prójimo o, tal vez, nos hemos cansado de ayudar al ver tantas llagas abiertas en medio de nuestro mundo?
ALBINA MORENO
NADA TE TURBE