15 de octubre
SANTA TERESA DE JESÚS, virgen y doctora
¡Qué grande es el corazón de Jesús! Cuando los pobres ya no pueden más, Jesús les ofrece su vida para descansar. Junto a Jesús se recrea la vida. Teresa de Jesús aprendió a estar con "tan buen amigo presente, con tan buen capitán, que se puso en lo primero en el padecer, todo se puede sufrir; es ayuda y da esfuerzo; nunca falta; es amigo verdadero".
El atractivo de Jesús, la Hermosura de Humanidad, que conquistó el corazón de la Santa, será, también, el centro de tu mirada y desplegará en ti una vida nueva. Uno de tus ejercicios más utilizados, día a día, será mirar a Jesús en tu interioridad. No os pido ahora que penséis en Él no os pido más de que le miréis Mirad que no está aguardando otra cosa sino que le miremos.
Te mirará Él con unos ojos tan hermosos y piadosos, llenos de lágrimas, y olvidará sus dolores por consolar los tuyos, sólo porque te vayas con Él a consolar y vuelvas la cabeza a mirarle sta. Teresa